"Creo en el amor a primera vista, y a segunda vista, y a todas las vistas posibles. Creo en los abrazos de más de quince segundos y en la primavera que trae consigo una nota de voz. Creo en las ojeras, en las curvas preciosas, en la fiebre del momento. Creo en los nervios de la primera cita, la emoción de la segunda, y la felicidad de todas las restantes. Creo en las promesas como palabras de amor y en los garabatos al final del cuaderno. Creo en los detalles, no en los regalos de aniversario. Creo en los errores, no en las justificaciones. Creo en las despedidas, pero nunca en los regresos. Creo en la libertad y la opción de compartirla, no creo en la pertenencia. Creo en la confianza y en los motivos para perderla. Creo en la valentía del insomnio, en lo agradable del sueño, en las razones para no querer dormir. Creo en la conquista por una sola persona, no creo en el cariño compartido. Creo en las canciones cuando uno está enamorado y en el desprecio cuando todo terminó. Creo en los ataques de risa, en el arte de besar el cuello, en la magia de un helado entre los dos. Creo en los finales como parte de la historia y en la desaparición de todos los fantasmas. Creo en la desilusión de haber querido de más, pero sobre todo, en las ganas de empezar todo de nuevo."
- Estefanía Mitre